Enfermedades, Zona Porcino

Algunas cuestiones relevantes sobre los circovirus porcinos

Los circovirus porcinos (PCV) pertenecen a un género de virus conocidos por ser los organismos más pequeños con capacidad para infectar células de mamíferos, ya que carecen de envoltura y un genoma circular monocatenario de máximo 2 000 nucleótidos (es el caso de PCV 3).

Son cuatro las especies conocidas hasta la fecha:

  • PCV-1, descubierto en 1974, y PCV-2, en 1997, son las que se han investigado más profundamente. PCV-2 sigue ocupando muchas líneas de investigación más de 20 años después de su descubrimiento.
  • PCV-3, descubierto en 2015, y PCV-4, en 2019.

Un dato curioso es que, a pesar de tener muchas características comunes entre ellos, estos circovirus comparten menos del 80% de identidad en la secuencia de nucleótidos entre ellos.

PCV-2 causa pérdidas de casi 6 000 millones de euros anuales en la UE

Teniendo en cuenta el interés de la comunidad científica y la industria porcina sobre los circovirus, Zoetis ha publicado recientemente un estudio de revisión con el objetivo de actualizar los conocimientos más novedosos sobre los mismos:“Que hay de nuevo en los circovirus porcinos: de los genotipos de PCV-2 al PCV-3”.

En el mismo, se abordan temas como la distribución de genotipos de PCV-2 a nivel mundial y su clasificación filogenética, la controversia que rodea a la patogenicidad de PCV-3 y a su potencial importancia, así como el reciente descubrimiento de PCV-4.

Respecto a PCV-2 a pesar de que inicialmente se consideró no patógeno para el cerdo, destacar que anualmente causa en la actualidad 216 millones de euros en pérdidas tan solo en Reino Unido. Unas pérdidas relacionadas principalmente con la mortalidad y la pérdida de crecimiento en los cerdos durante el periodo postdestete. Haciendo un ejercicio de proyección, teniendo en cuenta el censo porcino en la Unión Europea, estaríamos hablando de 5.800 millones de euros de pérdidas anuales para el sector porcino comunitario a causa de PCV-2.

Los PCV-2 pueden producir un conjunto de enfermedades conocidas como enfermedades asociadas a los mismos y que incluyen:

Enfermedad sistémica por PCV-2 (ES-PCV-2), antes conocida como síndrome multisistémico del desmedro posdestete, PMWS en inglés.

  • Enfermedad reproductiva por PCV-2 (ER-PCV-2)
  • Síndrome de dermatitis y nefropatía porcino (SDNP).

Con la implantación masiva de programas de vacunación frente a PCV-2 se descubrió, además, la infección subclínica por PCV-2 (ISPCV-2) y su efecto sobre el crecimiento.

En cuanto a PCV-3 lo único que a fecha de hoy es indiscutible es que está ampliamente extendido en muchos de los países productores de cerdo, aunque la relación directa entre su presencia y una sintomatología concreta aún no se ha determinado.

Del último en llegar, PCV-4, poco se sabe aún, constituyendo hasta la fecha toda una incógnita, al haberse detectado en tan solo una ocasión en relación a casos clínicos graves de cerdos con síntomas respiratorios y digestivos y Síndrome de Dermatitis y Nefropatía Porcina (SNDP).

Genotipado de PCV-2

En el caso de este tipo de circovirus se considera que solamente existe un serotipo, independientemente de los genotipos establecidos, al haberse descrito protección inmunológica cruzada entre ellos.  En cuanto al genotipado, especialmente interesante para determinar variaciones individuales específicas y poder correlacionar las mismas con la virulencia, epidemiologia o afinidad por determinadas células del organismo hospedador, no fue hasta 2018 cuando se estableció la clasificación hoy día vigente. La misma propone 8 genotipos diferentes que van desde el PCV-2a hasta PCV-2h y la evidencia demuestra un hecho importante: se pueden encontrar distintos genotipos de PCV-2 infectando a un mismo cerdo e incluso agentes recombinantes entre los mismos, habiéndose demostrado la inmunidad cruzada, de ahí la variabilidad de vacunas existentes algunas, incluso, recombinantes.

De la cuestionada patogenicidad de PCV-3 al desconocimiento sobre PCV-4 

Es importante recalcar la controversia sobre la patogenicidad de PCV-3. Lo cierto es que la presencia de este tipo de circovirus en animales enfermos o con alguna condición patológica, aunque ampliamente documentada, no resulta suficiente como para poder establecer una relación causal, pues también se ha hallado el virus de forma frecuente en animales sanos, lo que podría cuestionar su patogenicidad y relevancia clínica.

Y cerramos esta entrada a nuestro post con ese gran desconocido: PCV-4. Como decíamos, solo ha sido hallado una vez, en China, en animales con signos respiratorios, entéricos y SNDP. Su genoma tiene una longitud de 1770 nt, siguiendo la organización genómica típica de los PCV y curiosamente el análisis filogenético reveló que la identidad genética más próxima era con el circovirus de visón (66,9 %).

¿Sabías que…?

  • Hoy en día, el control de las enfermedades causadas por PCV-2 se consigue, entre otros muchos factores, mediante el uso de vacunas comerciales. Sin embargo, la elevada capacidad de mutación de este virus hace que el estudio de la evolución vírica y su epidemiología sean clave para garantizar dicha eficacia y el control de la enfermedad.
  • La investigación relativa a la patogenicidad de PCV-3 (y PCV-4) debe continuar, para así determinar los esfuerzos que se deben dedicar a su control.

Si queréis saber más, no olvidéis descargaros “Que hay de nuevo en los circovirus porcinos: de los genotipos de PCV-2 al PCV-3”

¡Esperamos os resulte interesante!