Prevención, Zona Porcino

¿cuál es la cobertura antigénica de las vacunas actuales frente a pcv2?

A pesar de ser un virus ADN, la tasa de evolución del circovirus porcino de tipo 2 (PCV2) es mayor de la esperada. Adicionalmente, el PVC2 presenta una alta tasa de mutaciones puntuales. Si a estas características les sumamos que es habitual que varios genotipos de PCV2 coexistan en una misma granja, el resultado final es que entre un 20 y un 35 % de los PCV2 son recombinantes. Pero no debemos olvidar que en la evolución del PCV2 también interviene la vacunación y la presión inmune resultante.

Así, como ya sabemos, el PCV2a, que era inicialmente el genotipo más prevalente, cedió su primera posición al PCV2b, y este a su vez al PCV2d. Por otro lado, la protección inducida por la vacuna PCV2 contra las cepas de campo se puede atribuir parcialmente a los determinantes epitópicos comunes o únicos de los virus PCV2 vacunales y de campo. Los epítopos son los fragmentos específicos de los antígenos reconocidos por las células del sistema inmunitario, entre ellas los linfocitos T. En este sentido, tener un alto grado de similitud entre los epítopos de los virus vacunales y los de campo es esencial para obtener un amplio reconocimiento inmunitario; y, en una vacuna, cuanto mayor es la cobertura media de epítopos de células T, mejor cubre esta el contenido de epítopos de células T de las secuencias de cepas circulantes.

Atendiendo a estos hechos, se pudiera pensar que las vacunas tradicionales basadas únicamente en PCV2a no proporcionen una cobertura de epítopo óptima frente a los actuales y futuros aislamientos de campo. De esta forma, al seleccionar candidatos vacunales, es importante considerar no solo el contenido y densidad de epítopos de las céulas T, sino también el potencial para inducir células T de memoria que reconocerán los epítopos contenidos en las cepas circulantes: es decir, la vacuna debe ser inmunogénica (capaz de inducir una respuesta inmunitaria), pero también debe contener epítopos de células T que correspondan adecuadamente con las cepas circulantes que puede encontrar el animal vacunado.

EN BÚSQUEDA DE UNA MAYOR PROTECCIÓN

Con la ayuda de la bioinformática (en concreto herramientas como PigMatrix y el algoritmo EpiCC), se ha estudiado de manera predictiva la respuesta generada por diferentes vacunas frente a PCV2 teniendo en cuenta los variables anteriormente expuestos.

De dicho estudio* se desprende la conclusión de que, en la búsqueda de una cobertura antigénica más amplia frente a las cepas circulantes y emergentes actualmente de PCV2, parece conveniente la actualización de las vacunas empleadas apostando por vacunas multivalente contra PCV2 que abarquen una mayor similitud de epítopos respecto a las cepas circulantes. En concreto, se registró una cobertura mejorada de las vacunas multivalentes frente a las vacunas monovalentes, siendo especialmente evidente esta contra PCV2b, así como contra PCV2d.

A pesar del éxito en el control de la enfermedad y en la vacunación frente a PCV2, la infección por PCV2 todavía está muy extendida. La protección cruzada solo parcial, la rápida tasa de evolución de PCV2 y otras razones, como el movimiento de animales, ayudan a explicar por qué PCV2a, PCV2b y PCV2d siguen circulando a nivel mundial incluso en animales vacunados. Dado que la brecha genética entre las cepas de campo y las vacunales está aumentando y que tener genotipos múltiples ofrece una protección más amplia frente a cualquier cepa, es apropiado utilizar una vacuna que contenga PCV2a y PCV2b.

Es posible acceder al estudio completo aquí.

*Meggan Bandrick, Andres H. Gutiérrez, Prerak Desai, Gonzalo Rincon, William D. Martin, Frances E. Terry, Anne S. De Groot, Dennis L. Foss en Veterinary Immunology and Immunopathology, Volume 223, mayo 2020. Artículo original y materiales suplementarios en https://doi.org/10.1016/j.vetimm.2020.110034.